lunes, 13 de diciembre de 2010

Laura promete a Marcelo que le regalará la hora sin cámaras por Reyes

Laura promete a Marcelo que le regalará la hora sin cámaras por Reyes


La relación de Laura y Marcelo marcha viento en popa y a toda vela. Pero no todo es perfecto, la promesa que Laura hizo a su padre de no mantener relaciones sexuales en el concurso, los está matando. Por eso, la pareja no puede hacer otra cosa que darse un consuelo parcial, o más bien manual. Sus compañeros son conscientes de que tienen las hormonas cada vez más revolucionadas y Terry no ha podido callarse. La tinerfeña le ha explicado a la de Parla que de cara a sus padres es lo mismo "tocar la zambomba" que llegar hasta el final. Unas palabras que han hecho reflexionar a Laura, que ha zanjado el tema prometiéndole a Marcelo que para Reyes le regalará ¡una hora sin cámaras!

Laura y Marcelo están cada vez más unidos . La pareja, que incluso se presentó ante Byamba como "novios", no se separa ni a sol ni a sombra y tanto roce hace que sus hormonas estén cada vez más revolucionadas. Pero tienen un gran problema, el hecho de que Laura prometiera a su padre que no mantendría relaciones sexuales en 'Gran Hermano' está acabando con ellos.

La pareja no aguanta más y como unos gaticos en celo, no pueden reprimir su pasión allá por donde van. El nicho ha sido testigo de su amor en numerosas ocasiones, pero la situación ha pasado a mayores. Dado que no pueden consumar como es debido, Laura y Marcelo han optado por darse un consuelo un poco más 'disimulado', utilizando las manos como herramienta base.

Pero como bien dice el refrán, 'uno cuánto más tiene, más quiere' y eso es lo que les ha sucedido a ellos, que tras salir del edredón pasaron por el baño y no se pudieron resistir a volver a jugar un poquito, pero eso no fue todo, más tarde y en la ducha la pasión fue tal que el mismo Marcelo tuvo que frenar a la de Parla para no hacer ningún desacierto: " Laura tía, córtate la mano. Esto es una locura, locura. Laurita, Laurita, locura, locura. De verdad, que luego no puedo parar como sigas".

Los compañeros de la pareja eran conscientes de las ganas reprimidas que tenían, por eso Terry decidió sincerarse con su amiga y acabar con el suplicio. Lo primero que intentó fue convencer a Laura de que lo mejor que podían hacer era pedir una hora sin cámaras y para no enfadar a sus padres, "hacerlo en modo silencio". La de Parla no se quedó convencida en este primer intento, porque según ella, "no es lo mismo, yo no lo puedo hacer en modo silencio". Tras la primera charla, posiblemente por la ilusión de lo bien que podrían pasárselo si hicieran caso a Terry, Laura y Marcelo volvieron de nuevo al nicho y dieron suelta a su pasión manual.

Terry no se dio por vencida y en cuanto la pareja terminó de darse amor volvió de nuevo a la carga: "Lo que no entiendo es por qué te estás cortando tanto, si el que te vean ahí metiéndote la..., es lo mismo que tal. Te está poniendo una barrera, porque se va a ver igual que estés ahí tocando la zambomba que el que copules, ¿me entiendes? Para estar haciendo el bobo conteniéndote, desahógate ya, tía. Tú estás trababa y te estás conteniendo por lo que se pueda ver fuera y es por tu familia, ¿verdad? Yo te entiendo, pero te digo que, desde mi punto de vista, creo que me sentaría igual verte copulando que verte haciendo eso, que al final es lo mismo".

Laura le confesó a Terry que lo estaba pasando muy mal, que no aguantaba más el no poder tener relaciones sexuales completas con Marcelo y que, de un momento a otro, llegaría el momento que se liara la manta a la cabeza y se dejara llevar. Mientras tanto, Marcelo que estaba escuchando la conversación desde el nicho, no podía reprimir la sonrisa al escuchar tanto las palabras de apoyo de la tinerfeña como el aviso de Laura de que en muy poco tiempo se iba a olvidar de la promesa que hizo a su padre y se quitaría la espinita que tanto los estaba haciendo sufrir.

Ese gran momento llegó antes de lo que el Malaguita podía imaginar, pues poco después de la charla, Laura le dijo las palabras que más esperaba escuchar. "Si estamos aquí para Reyes, ya sé lo que te voy a Regalar", le dijo Laura. Marcelo, ilusionado como un niño pequeño, le preguntó: "¿La hora sin cámaras?", a lo que ella le respondió afirmativamente. Contentísimo y lleno de alegría, le concursante dio las gracias a Terry por la ayuda prestada y, por orden de Byamba, que les cortó un poquito el rollo durmió más feliz que nunca. Ahora sólo queda esperar hasta la mágica noche para saber si la pareja por fin disfrutará de la ansiada hora sin cámaras...

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